lunes, 27 de diciembre de 2010

Festival Homenaje a los chicos de Cromañon (26 de diciembre de 2010)

La tarde del domingo 26 de diciembre fue calurosa. El colectivo que me llevó parecía un horno. Esa mañana había recibido un email contándome de un festival de rock en la plaza de Isidro Casanova. Muchas bandas tocando al aire libre, gratis. Un buen motivo para dejar el frío aliento del ventilador y enfrentar el infernal verano.
Pero las bandas tocaban por un motivo específico. Querían rendir homenaje a las víctimas que dejó la mayor tragedia no natural que tuvo este país, querían recordar con su música y sus canciones a los chicos de Cromañon. Un buen motivo para enfrentar cualquier condición climática y decir presente.
Desde hace un tiempo hay una pirámide en la plaza de Isidro Casanova que recuerda a esos amigos y vecinos que ya no están. Ese domingo 26 de diciembre padres, familiares, amigos y sobrevivientes inauguraron una placa renovando su homenaje y su eterno pedido de justicia.
Por si algún extranjero leyera este blog (o algún compatriota descolgado de mundo), sepan que el 30 de diciembre de 2004 casi 200 personas murieron en un incendio en la Ciudad de Buenos Aires, durante un recital de la banda Callejeros en el boliche República de Crogmañon. Hubo muchas acusaciones, incluso un juicio que condenó a unos cuantos. Pero al momento de escribir esta entrada no hay nadie preso.
Sobre el escenario pasaron Azulejo, Veredas Viejas, Guisardo, Maldita Suerte, Intro, Viejo Rastrero, bandas con diferentes estilos que dieron variedad al recital. El cierre estuvo a cargo de Guillermina, en mi opinión, el mejor número del festival.
También estuvieron los padres que recordaron a sus chicos y nombraron una por una a todas las víctimas de aquella noche aciaga. Una lista interminable que nunca debemos olvidar.

martes, 21 de diciembre de 2010

Larga vida al Grinch (21 de diciembre de 2010)

“No es oro todo lo que reluce,
ni toda la gente errante anda perdida...”
J R R Tolkien

Diciembre es un mes de balances. La llegada del solsticio y el cambio de numeración en el calendario gregoriano pone festivos a algunos, y reflexivos a otros.
Desde mi propia experiencia, puedo decir que la cultura independiente está más viva que nunca. En mi peregrinar por ferias, exposiciones y eventos de todo tipo hallé incontables puertas abiertas, y gente que me invitaba a compartir la gran aventura de ganar nuevos espacios y difundir nuestros trabajos.
Por un lado, no encontré techo. Siempre tuve la sensación de que se podía llegar más lejos, al infinito y más allá. Aún en eventos que no tuvieron la convocatoria esperada, quedaron bases sólidas para continuar, siempre continuar.
Pero sí encontré el piso. Y dejémoslo así.
A los Autores Matanceros, a la Biblioteca Popular de Virrey del Pino (organizadores de la feria homónima), al Galpón Cultural de Tapiales, al Transformador de Haedo, a la FLIA, a la banda Vorkuta y su Feria Cultural Rebelión, a la Biblioteca Popular Ornella Martínez, a la Biblioteca Popular Madre Teresa, al programa radial Cultura desde el Pie, al Festival Atalaya Rock, al bar El Altillo, a todos los que compartieron mesa conmigo en las ferias, y a toda la gente errante que no anda perdida, Salud.

sábado, 11 de diciembre de 2010

7º Festival del Copete (11 de diciembre de 2010)

La lluvia siguió cayendo con intermitencia el sábado 11 de diciembre, lo suficiente como para hacer imposibles las actividades al aire libre. Igual no me desanimé. Me fui a San Justo para seguir disfrutando del 7 º Festival del Copete. Claro, esta vez bajo techo.
En la Escuela Nº1 Mariano Moreno, ubicada sobre la calle Irigoyen, frente a la Plaza Gral. San Martín, se presentó el grupo español L’Aljub Teatral, con la obra Esperanza. Dedicada principalmente al público infantil, en ella dos actores recrean escenas muy cómicas, con poca escenografía y mucho talento.
Además de estos españoles, durante el festival se presentaron y se presentarán grupos de Perú, Guatemala y Francia. Una gran oportunidad de disfrutar de la cultura, cerca de casa, con entrada libre y gratuita. Corran a aprovecharla.

viernes, 10 de diciembre de 2010

7º Festival del Copete (10 de diciembre de 2010)

Aclaro, antes que se den cuentan por ustedes mismos, que no sé nada de teatro. Me gusta ver una obra de vez en cuando, mis conocimientos no pasan de eso. Así que asistir a un festival de teatro es toda una experiencia nueva para mí.
El viernes 10 de diciembre llegué a la Plaza General San Martín de San Justo, y me encontré con gente disfrazada, tambores, guitarras, cantos, bailes, zancos, títeres, colores vivos. Se trataba de varios grupos de teatro que participan en el 7º Festival del Copete, encuentro anual de teatristas organizado por La Cordura del Copete.
La Cordura del Copete es un grupo de teatro que tiene su centro de operaciones en La Matanza desde el año 2000. Su sede se encuentra en la calle Arieta al 3694. Este séptimo festival arrancó el lunes 6 de diciembre, y va concluir el domingo 12 de diciembre, con la participación de grupos nacionales y extranjeros.
Algunas de las actividades programadas para el viernes 10 tuvieron que ser suspendidas por la lluvia que cayó buena parte del día. No obstante, pasadas las 17 hs el buen tiempo llegó y un par de horas después comenzó el desfile de los grupos de teatro que hicieron breves presentaciones, atrayendo la atención de los transeúntes y numerosos aplausos.
Como número principal, el grupo El baldío teatro de Palomar presentó “Sueños de serenata”, donde se mezclan murga, tambores, y puestas en escena sobre populares piezas musicales. Ya entrada la noche, el festival incluyó un recital musical de la banda Se armo, que fusiona ritmos folclóricos y electrónicos, y se atreve a reversionar, en otros ritmos, clásicos de Hermética.
Todas las actividades del festival son con entrada libre y gratuita, aunque los grupos suelen pasar la gorra. Además de la Plaza General San Martín, hubo y habrá actividades en otras sedes. Para más información consulten:
www.lacorduradelcopete.blogspot.com

domingo, 28 de noviembre de 2010

TapialEs Arte (28 de noviembre de 2010)

La cultura está creciendo. Y está creciendo con construcciones colectivas. ¿Le parece exagerado? Déjeme que le cuente.
El domingo 28 de noviembre, pasado el mediodía, un amigo de toda la vida, Pablo Bondar, pasó a buscarme por casa. Ibamos a la Plaza de la Bandera, en Tapiales. Él es músico, llevaba a cuestas sus discos. Yo soy escritor, y andaba con mis libros bajo el brazo.
En la plaza, nos encontramos con la gente del Galpón Cultural Tapiales, a quienes conocí a través de Christian Malattia, autor matancero con el que nos hemos cruzado y colaborado en varias ferias. En fin, esta gente estaba a dos manos armando un escenario y una muestra de arte, pero aun así les sobró un dedo para señalarnos el lugar destinado a los puestos.
El Galpón Cultural Tapiales es un grupo de vecinos de la localidad homónima entre la que se encuentran escritores, artistas plásticos, músicos y gente interesada en la cultura porque sí. Por segundo año consecutivo convocaron a una muestra de arte en la plaza de la ciudad, con el detalle de que en esta ocasión también invitaban a participar en la primera Feria del Libro Independiente de Tapiales.
Las ferias del libro independiente tienen sus particularidades. Puesto es un nombre muy generoso dado a un espacio de exposición y venta. Puede ser una mesa de camping, o una tabla arriba de dos caballetes, o una caja de manzanas dada vuelta. Allí se ponen los libros, revistas, discos, folletos, el termo y el mate, y cualquier otra cosa mientras la mesa aguante el peso. El expositor puede ser cualquiera que quiera mostrar lo que hace. Lo único que tiene que hacer para participar es llegar al lugar de evento y armar su propio puesto.
El centro de la Plaza de la Bandera fue ocupado por estos puestos, que tal mercado de pulgas, ofrecían cultura a los visitantes, sin intermediarios. Del autor al lector, pero en serio. Expositores venidos de diferentes lugares de La Matanza, del conurbano y la Ciudad de Buenos Aires, nos mezclábamos, confraternizábamos y concordábamos nuevos puntos de encuentro para otros eventos.
Mientras los transeúntes recorrían la feria, en el escenario varias bandas de rock, entre las que estaban Visiones en 3D y La Nuez, tocaron sus temas, aunque también hubo lugar para el folclore, y para que algunos poetas leyeran sus obras.
El evento congregó a gente de la zona que se acercó a recorrer su plaza. Y también otros que vinieron de más lejos a conocer o reencontrarse con su vecino artista. Gente que paseó, compró, opinó y aplaudió, convirtiéndose en parte de la construcción colectiva.
Una construcción colectiva que nació en la decisión del Galpón Cultural Tapiales de poner el hombro y el corazón para llevar adelante el proyecto y gestar una espectacular fiesta cultural, pero que sería imposible sin la participación de quienes salen de sus casas con su arte en la mochila, de los que asisten, de los que difunden. Todos tienen una parte que jugar, más grande o más pequeña, pero igual de importante.
Mil gracias al Galpón Cultural Tapiales por generar este espacio. Estará en el resto de nosotros saber aprovecharlo para generar más espacios, para construir más cultura.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Encuentros Culturales en El Altillo (12 de noviembre de 2010)

Continúan los Encuentros Culturales en El Altillo.
Consultas a: tulugar.cultura@gmail.com

domingo, 31 de octubre de 2010

Cultura desde el pie (30 de octubre de 2010)

El sábado 30 de octubre fui invitado al programa radial Cultura desde el pie, que se transmite por FM Universo 94.7, todos los sábados de 15 a 17 hs. Conducido por Emilio y por María Victoria, el lema del programa es “difundir a los hacedores de nuestra identidad cultural”. En ese sentido, por el programa han pasado músicos, historietistas, artistas plásticos, y muchos referentes de la cultura local.
Este sábado también estuvieron invitados los autores Carlos Rigel y José Enrique Paredero, con quienes debatimos, junto a Emilio, el conductor, sobre la literatura en general, y sobre la literatura en el partido de La Matanza en particular. Debo confesar que es mi primera experiencia dentro de un estudio de radio, hasta ahora sólo había contestado por teléfono breves entrevistas, lo que supongo que se habrá notado por la multitud de errores y actos fallidos en los que incurrí, pero lo importante es que me dieron espacio para difundir mis actividades y las de mi colegas.
Mil gracias a Emilio y a María victoria por la invitación. Y a quienes lean esto los invito a escuchar el programa todos los sábados. No tiene desperdicio.



martes, 26 de octubre de 2010

A quien ya no está (21 de octubre de 2010)

”Yo sé que ahora vendrán caras extrañas
con su limosna de alivio a mi tormento,
Todo es mentira, mentira es el lamento...
Hoy está solo mi corazón.”
Gardel – Le Pera

En septiembre de 2006 puse en línea el primer y único portal web dedicado al barrio Los Manzanares de Villa Luzuriaga. Yo lo creé, escribí la mayor parte de las publicaciones, edité todas las fotos, y cuando vi que era el momento, di por terminado el proyecto, dejando el portal en línea para que todo el mundo pudiera apreciar sus contenidos.
Pero la existencia de ese espacio en Internet se la debemos a mi primo, Damian Orellana. Fue su empuje y preocupación por el barrio donde habíamos transcurrido nuestras vidas la verdadera causa de que empezáramos aquel camino, camino que nos llevó por lugares insospechados, tantos buenos como malos.
Hoy, mi primo en particular, y toda la familia en general, pasa por un muy mal momento. Su padre (mi tío), Carlos Alejandro Orellana, ha fallecido el último 21 de octubre, víctima de un cáncer que lo castigó los últimos meses. Hombre trabajador, padre de familia, hincha de River, vecino desde siempre del barrio, nos dejó con apenas 48 años.
No pretendo hacer un obituario, ni mucho menos amontonar frases de pesar que no amortiguan ningún dolor. Sólo quiero rendir el humilde y vano homenaje de las palabras a quien ayer compartió parte de nuestro camino, y hoy no está con nosotros.

domingo, 24 de octubre de 2010

Yo no lo voy a ver (17 de julio de 2005 - 5 de febrero de 2010)

Mis abuelos llegaron con sus hijos a cuestas al barrio Los Manzanares en marzo de 1957. Llegaron en medio del barro. La única calle asfaltada era Berna, con una fina capa de concreto agrietado, el resto de las arterias de la recientemente rematada quinta productora de manzanas eran lodazales por donde mis abuelos y sus hijos tuvieron que acarrear muebles, ropas y demás objetos que traían para empezar una nueva vida, en aquel lugar del mundo que a partir de entonces llamarían hogar.
Mi abuelo falleció el 17 de julio de 2005. Fue velado en la casa que sus manos obreras construyeron a lo largo de cinco décadas. Esa noche llovió. A la mañana siguiente, la carroza fúnebre se lo llevó en medio de ciénagas inmundas a las que por falta de otro nombre llamábamos calles.
Cuando mis abuelos compraron el terreno, les prometieron que el asfalto para el incipiente barrio era algo inminente. Los años pasaron. El asfalto no vino. Se hicieron decenas de nuevos proyectos. Se hicieron miles de promesas. Se pagó, a través de impuestos o de fondos comunitarios, la promesa de proyectos de gris concreto sobre nuestras calles.
En los últimos años de su vida, cada vez que se escuchaba en el murmullo del barrio que venía el asfalto, mi abuelo decía “yo no lo voy a ver”. Todo una profecía que se cumplió con la precisión de un reloj. El reloj de su vida que se quedó sin cuerda para continuar.
A fines de 2007 apareció un nuevo proyecto, una nueva promesa. Asfalto comunitarios, con gastos compartidos por el municipio y los vecinos. Cuando mi abuela se enteró, lo primero que dijo fue “yo no lo voy a ver”.
No todos podían pagar el nuevo proyecto de pavimentación, ni con el más luengo y generoso plan de pagos. Mi abuela no tenía ingresos, gastaba más dinero en medicamentos que en comida. Y junto con mi abuelo habían pagado tres, cuatro o quizás más veces por ese asfalto que querían cobrarle de nuevo.
Yo no podía ayudarla. Su casa también era mi hogar. Sin embargo, mi economía estaba tan devastada como la suya. El asfalto pasó cerca, pero pasó de largo.
El 5 de febrero de 2010 el corazón de mi abuela dijo basta. Sus párpados se cerraron por última vez en un día lluvioso. Y en medio del barro, fui a despedirla.


sábado, 16 de octubre de 2010

Encuentros Culturales en El Altillo (15 de octubre de 2010)

Esta entrada requiere un largo prólogo. Para ello, debo remontarme a la segunda Feria Municipal del Libro del Partido de La Matanza (septiembre de 2009). Entonces, como un paracaidista sin brújula, caí al stand de Autores Matanceros con la esperanza de exponer mi libro. Quince minutos después estaba atendiendo dicho stand (decir que era el responsable sería una irresponsabilidad).
En esa segunda edición, a diferencia de la primera y la tercera, en las que también estuve, noté la participación de algunas estrellitas, o sea, autores que se creían Borges y Sábato en uno solamente porque habían publicado un puñado de obras. Entonces, apareció Elisa Peñaloza, con sus libros bajo el brazo. Mi primera impresión fue que era otra estrellita que venía a enseñarnos como convertir una buena hipérbola en una mediocre metáfora.
Los siguientes días de esa segunda feria municipal, Elisa Peñaloza se encargó de enseñarme que soy un completo inútil para juzgar a la gente. Rápidamente se calzó el imaginario overol, y se puso a trabajar para sacar el stand de Autores Matanceros adelante. No su libro, no su carrera o trayectoria, sino el stand, el canal de difusión del colectivo de escritores de La Matanza.
A mediados de 2010, me llegó un mensaje de Elisa. Me invitaba a participar de unos Encuentros Culturales que estaba organizando. En fin, la frase era muy ambigua y no entendía ni remotamente de que se trataba. Más adelante, con motivo de la convocatoria de escritores para la tercera Feria Municipal del Libro, tuvo oportunidad de explicarme con detalle de que se trataba su proyecto. Otro montón de frases ambiguas que, al igual que el título Encuentros Culturales, no explicaban nada. Pero esta vez si le entendí.
Entendí que tenía un sueño. El sueño de nuevos espacios para la cultura. Y que también tenía el potencial para lograrlo.
En otros ámbitos, los sueños son imágenes difusas que aparecen mientras se duerme. En el ámbito del arte y la cultura, se sueña despierto, y se construye la realidad a partir de los sueños.
Mil veces escuché, entorno a una mesa de café, mil proyectos sobre juntar en un mismo espacio a referentes de distintas disciplinas, como punto de encuentro para generar nuevos espacios, nuevos eventos, en el corazón de nuestro partido de La Matanza, donde la cultura es un bien perecedero, y generalmente vencido. Proyectos que terminan con el último humo del café.
Elisa Peñaloza tenía todo lo necesario para arrancar. Tenía el lugar, un bar, El Altillo, en la calle Entre Ríos al 2900, en el centro de San Justo. Tenía colaboradores poniendo el hombro, la cabeza y el corazón en el proyecto, nombraré a Lorena Fernández y a Adela Salas por resultarme las más conocidas, pero estoy seguro que no fueron las únicas personas que contribuyeron al resultado final. Tenía expositores de los más variados tipos comprometidos a participar.
Finalmente el 15 de octubre, la cosa arrancó en serio. Con exposición de cuadros de la artista plástica Mónica Maurelli, y fotografías de Rubén Villani decorando una de las paredes del bar, y libros de autores matanceros en el hall de entrada, la gente fue llegando desde las 19 hs y acomodándose entorno a las mesas. Hubo ponencias de Mabel Zanga y Analía La Torre. Omar Celiz presentó su libro de poesías El tiempo después. El grupo de teatro Laferrere puso en escena un fragmentó de una obra. La banda La Cresta de Don Gregorio tocó algunas canciones, al igual que Irma Morena que cantó folclore, y Pablo Bondar, que fuera de programa ejecutó algunos temas de su disco Nuevo aliento. Y mucha gente más que participó de diversas formas, no siendo la menor la presencia y el aplauso.
Perfectible, todo es perfectible. Aún hay camino que recorrer. Estos encuentros se repetirán el segundo viernes de cada mes, y hay que estar preparados. Pero la primera experiencia fue altamente positiva. El sueño se volvió cimiento de la realidad, y Elisa Peñaloza, contrario a lo que pensé cuando la conocí, fue la estrella más brillante en el cielo matancero.


lunes, 11 de octubre de 2010

Poesía Bar en el Galpón Cultural Tapiales (11 de octubre de 2010)

El lunes 11 de octubre fue feriado, en conmemoración del 12 de octubre, el llamado día de la raza (sin aclarar si es la raza exterminada, la exterminadora, o la que germinó de las semillas de ambas). En definitiva, fue feriado, una buena oportunidad para salir y disfrutar de la cultura.
En esta oportunidad me trasladé hasta Tapiales. Frente a la plaza, sobre la calle Humaitá, se encuentra el Galpón Cultural Tapiales, centro cultural dedicado a promover el arte en sus diferentes vertientes, y este lunes en particular, la lectura de poesía café mediante.
Como el nombre lo indica, se trata de un galpón. Sólo que la fachada está decorada con un amplio mural, y al ingresar, uno se encuentra con cuadros, esculturas, y a un grupo de artistas dibujando sobre las paredes aún blancas. Mientras los organizadores de la velada preparaban café, autores, músicos y simples interesados en la cultura iban llegando y acomodándose entorno a improvisadas mesas.
Una vez que hubo público suficiente, se arrancó con la música de guitarras y piano, lecturas de poesías, fragmentos de cuentos y novelas, improvisaciones de poesía mezcladas con improvisaciones de melodías. Colegas escritores venidos de diferente partes de La Matanza, y aun de la Capital, entregaron sus palabras al micrófono que esperaba sin ninguna solemnidad transmitir rimas y párrafos.
Para esta ocasión, preferí leer algunas poesías pertenecientes a autores que conocí en el camino de la vida literaria, en lugar de algo mío. Otros prefirieron sólo escuchar, y dejar quizás para una ocasión venidera, la lectura de sus obras.
Una tarde muy amena, informal y literaria fue la que pasamos en Tapiales, una experiencia que sin duda deberíamos replicar a lo largo y a lo ancho de nuestro partido, de nuestra provincia, del mundo entero. Aunque por ahora con una vez al mes en Tapiales es suficiente.

sábado, 9 de octubre de 2010

4º Feria del Libro en Virrey del Pino (9 de octubre de 2010)

Realmente no encuentro las palabras para calificar este evento. La atención de los organizadores, gente que iba y venía ocupándose de mil cosas, fue cordial hasta el extremo. Y también los difusores de la cultura que habitan y trabajan en esta localidad de Virrey del Pino, que se acercaron, nos contaron de sus actividades y nos agradecieron el que nos hayamos acercado. Y el público que recorrió la feria y se comportó de similar manera.
Pero muy por el contrario, los agradecimos somos nosotros, los que, una vez al año, vamos de diferentes puntos del partido de La Matanza a participar en la Feria, y nos enorgullece ser parte de la fiesta de la cultura, una fiesta popular, porque la entrada es libre y gratuita, y todo el mundo puede disfrutar del evento. Fiesta de la cultura porque nadie te dice que se puede decir, o publicar, o expresar, que existe o no existe. La cultura es todo lo que el ser humano hace, y no lo que los pulpos editoriales dicen que se puede difundir.
En la Feria del Libro de Virrey del Pino los que soñamos una difusión diferente de la cultura vemos nuestros anhelos hechos realidad. Escritores, músicos, narradores orales, bailarines, talleristas, conferencistas, artistas plásticos, bibliotecarios, todos mezclados intercambiando datos, y generando nuevos encuentros, y sembrando las semillas de nuevos eventos, y nuevas ferias, y mucha más cultura.
Mientras los stands atendían al público que recorría los pasillos de la escuela, en las aulas se realizaban actividades para todas las edades. Y en la carpa montada en el patio central se desarrollaban números artísticos de lo más variados tipos. Y hasta en el patio, a cielo abierto, hubo músicos folclóricos, y murga. Y tango. Y aplausos. Generosos aplausos de gente satisfecha de haber visitado la feria.
El viernes 8 de octubre, las Madres de Plaza de Mayo recorrieron la escuela y dieron una charla. El sábado 9 de octubre los Cantores del Alba cerraron con su música la Feria. Y probablemente otras personalidades de la cultura y la realidad social visitaron Virrey del Pino en estos días y escaparon a mi ojo nada clínico.
En definitiva, cambiando el sentido de una frase trillada, a los organizadores, a los expositores, a los compañeros escritores que se sumaron a nuestro colectivo de autores matanceros, sólo puedo decirles: sigan participando, porque participar es ganar, y en Virrey de Pino, ganamos todos.
Mil gracias por el espacio que nos dieron, mil gracias por crear tan maravillosa feria, mil gracias por existir.

miércoles, 6 de octubre de 2010

4º Feria del Libro en Virrey del Pino (6 de octubre de 2010)

Es casi el patio trasero del partido de La Matanza, y como muchos lugares de este populoso distrito, sólo es noticia en las páginas policiales. Sin embargo, en el año 2007, dio la gran nota. La localidad de Virrey del Pino lanzaba su primera Feria del Libro, organizada por una biblioteca popular, anticipándose por un año a la Feria Municipal del Libro, creando un espacio para la cultura en el corazón de barrios obreros mechados de quintas.
Este año la feria de Virrey del Pino va por su cuarta edición. Con la participación de las fuerzas vivas de la localidad, y artistas provenientes de toda La Matanza y más allá, este evento arrancó el miércoles 6 de octubre como una auténtica fiesta de la cultura. El lugar de encuentro es la Escuela Media nº15, ubicada en la intersección de las calles Correa y Girardot, a la altura del Km 40 de la ruta 3.
Por los pasillos de la escuela el vistante encuentra libros, revistas, esculturas, cuadros, y gente que hace cultura, comunicación, arte. Transmitiendo en vivo está la radio FM RadioActiva 90.1. Pero también populan por la feria periodistas, hombres de radio, comunicadores, que recogen, quiero creer, una grata imagen de este oasis de la cultura que ha generado la Biblioteca Popular de Virrey del Pino con su infatigable labor de años.
Y como no podía ser de otra manera, los escritores de La Matanza hemos clavado nuestra bandera también en esta feria, y estamos presentando libros de Irene Gardes, Elsa Montenegro, Carlos Rigel, y esperamos que muchos más.
La feria continua hasta el sábado 9 de octubre, y ofrece una variada grilla de actividades. No dejen de visitarla

lunes, 4 de octubre de 2010

Feria del Libro Independiente del Oeste (3 de octubre de 2010)

Desde hace varios años se realiza en diversos puntos del país la FLIA (Feria del Libro Independiente y Autogestivo), con una convocatoria creciente tanto en público como en expositores. El domingo 3 de octubre, la gente del Centro Comunitario el Transformador organizó la primera FLIO, o Feria del Libro Independiente del Oeste.
En una vieja casona ubicada en Caseros 200 de Haedo, una construcción con muchos años de historia, convertida en la actualidad en centro cultural y comunitario, expositores en su mayoría del oeste del gran Buenos Aires, pero también venidos de Capital y otros puntos del conurbano, nos reunimos para mostrar nuestros libros, revistas, folletos, obras digitales, y el largo etc.
Por La Matanza estuvimos, digamos que fuimos mayoría, los escritores de Villa Luzuriaga. A la sombra de los árboles de paraíso que rodean la casona, nos instalamos Gloria De Lucca, Alberto Fontana, Irene Gardes, y quien escribe. Para afirmar esta hegemonía de Villa Luzuriaga, también estuvo presente la gente de la banda de punk rock y heavy metal Vorkuta, exponiendo su música y libros artesanales.
También participaron otros escritores de La Matanza, como la artista plástica Elsa Montenegro, y otros que conocí en estas circunstancias y que han mostrado interés en continuar el contacto y el trabajo de difusión en otras ferias y exposiciones.
A lo largo de la jornada hubo de todo un poco. Transmisión en vivo de la radio FM En Transito, lecturas de poesías, números musicales, proyecciones, narraciones orales. Las Ferias del libro independiente son un extraordinario punto de reunión, no sólo para el encuentro entre público y artistas, sino también para que diferentes agentes culturales podamos compartir nuestras experiencias y pautar nuevos puntos de encuentro, multiplicando la cultura hasta el infinito.

domingo, 26 de septiembre de 2010

III Feria Municipal del Libro (25 de septiembre de 2010)

Lamentablemente, por problemas de salud, no he podido disfrutar como hubiera deseado de los últimos días de la 3ª Feria Municipal del Libro. Sin embargo, llegó la hora de dar las hurras y los agradecimientos por estos hermosos días que hemos vivido.
Gracias al Estado Municipal en general, y a la secretaría de cultura en particular, por esta impresionante fiesta de la cultura.
Gracias a Omar Celiz, padre fundador del Stand de Autores Matanceros, y a Elisa Peñaloza, que organizó la convocatoria de escritores en esta tercera edición.
El más fervoroso de los agradecimientos a los compañeros escritores que pusieron el hombro y el corazón en el desafío de llevar adelante un stand. Me refiero a Roberto Cisterna, Gloria De Lucca, Lorena Fernández, Alberto Fontana, Irene Gardes, Christian Malattía, Carlos Rigel, Adela Salas y probablemente algún otro que sabrá perdonar el olvido.
Gracias a todos los escritores que se acercaron, participaron y confraternizaron. Gracias a los medios locales de comunicación que nos difundieron. Gracias a los lectores, origen y finalidad de los libros.
Y también gracias a aquellos que, teniendo las oportunidades que a otros les faltó, eligieron el camino del egoísmo y la salvación personal, porque, por contraste, me hicieron valorar más el esfuerzo y la dedicación de quienes hacen de la cultura un bien social.
Mil gracias a todos.

jueves, 23 de septiembre de 2010

III Feria Municipal del Libro (22 de septiembre de 2010)

Llegamos al día 7 de la feria. Día de homenajes. En el escenario de la plaza distintos artistas rindieron tributo a Sandro, a Marco Antonio Solís y a los grandes clásicos del rockanroll.
En tanto, en el teatro Enrique Pinti, el grupo de teatro de la Universidad Nacional de La Matanza, presentó la obra 50 minutos, cuya trama está ambientada en una escuela de La Matanza profunda, y que termina siendo un homenaje a los docentes que hacen patria... a la vuelta de la esquina.

III Feria Municipal del Libro (21 de septiembre de 2010)

Día de la primavera: La Feria continuó con sus actividades. A las 15 hs, en el Centro Cultural del STMLM, los Autores Matanceros presentamos la última de nuestras actividades. En esta ocasión, presentó su libro la autora Alicia Castro. Se trata de una obra de temática religiosa llamada Revelación divina. A continuación, se realizaron diversas lecturas de los autoras Gloria De Lucca y Adela Salas. Para terminar, hice una evocación al papel del escritor.
El escritor cuenta lo que ve, lo que siente, lo que piensa, lo que le sucede, y en ese proceso, también cuenta lo que le pasa a otras personas. Voluntaria o involuntariamente, se convierte en la voz de los que no tienen voz. No porque sea un iluminado que vaya a cambiar al mundo, sino porque lo que no se cuenta, es como si jamás hubiera sucedido. He allí el valor del escritor.
Como última lectura, elegí un fragmento de mi cuento Más oscuro que la noche, como un pequeño homenaje a aquellos escritores que pagaron un precio muy alto por expresarse.
Más tarde, en la plaza, asistí al festival de rock, que con motivo de la primavera, reunió a varias bandas de La Matanza. Por casualidad, llegué a tiempo para escuchar a Cosecha Negra, banda que a mi oído no especializado y metalero, sonó excelente.

lunes, 20 de septiembre de 2010

III Feria Municipal del Libro (20 de septiembre de 2010)

Durante la cuarta jornada de la 3º Feria Municipal del Libro recibimos la visita en el Stand de Autores Matanceros de una movilera de la radio FM de la Universidad Nacional de La Matanza, que realizó una entrevista a Adela Salas. Más tarde yo salí al aire de la radio FM Malvinas de González Catán. Y aún queda pendiente una nota que nota ya grabada por canal 4 de San Justo, que está saliendo al aire esta semana. Así que atentos a sus medios locales, que de a poco estamos difundiendo nuestras obras literarias.
La tarde de esta jornada tuvo un marcado tinte histórico. La Junta Histórica La Matanza presentó cinco nuevos libros de la colección La Matanza, mi lugar. Dos de ellos están dedicados al nefasto periodo de la última dictadura militar y su brutal represión. Otro libro es sobre la historia de González Catán. El cuarto libro trata sobre la historia de los ferrocarriles en el distrito. Y el quinto es un recorrido por la historia de La Matanza, desde la prehistoria, hasta nuestro días.
A continuación dio una charla el prestigioso historiador Norberto Galasso, que recorrió la historia de la Argentina y su lugar en América y el mundo, desde la emancipación hasta nuestros días.

III Feria Municipal del Libro (19 de septiembre de 2010)

Verdaderamente tengo un problema. Me falta capacidad de crítica. Veo un niño pintando la pared, y me pongo a aplaudir. Y caminando por un mundo de actividades culturales es imposible que no se me cansen las manos de tanto golpear una contra otra.
A media tarde de la tercera jornada de la 3º Feria Municipal del Libro, en la carpa Cátulo Castillo, el grupo Sembradores de Historias nos obsequió con relatos orales. Historias con contenido social , historias de amor, historias cómicas, historias de suspenso, historian que emocionaban, estremecían y hacían reflexionar.
Después vino una de nuestras actividades. Con nosotros me refiero a los Autores Matanceros. Realizamos un homenaje a Pedro Bonifacio Palacios, el ilutre Almafuerte, el más grande de los escritores que dio La Matanza, con una semblanza escrita y leída por Adela Salas. Continuamos con presentaciones de libros de Liliana Amodeo, lecturas varias, y la presentación del libro Carlos Gardel y la raíz de mi genealogía, de Irene Gardes, obra donde la autora, sobrina nieta del zorzal criollo, cuenta la historia familiar.
Más tarde, en el escenario de la Plaza Gral. San Martín, asistí al recital del cantante Roberto Guiet, hombre de La Matanza, y su cuarteto Estilo Cuerdas. Concluyó la jornada, en el mismo escenario, con un recital de Ignacio Copani, otro artista matancero que deleitó al público con sus canciones.
Y hubo mucho más. Más de lo que pude ver, escuchar o aplaudir.

sábado, 18 de septiembre de 2010

III Feria Municipal del Libro (18 de septiembre de 2010)

El sábado 18 de septiembre, desde las 11 de la mañana hasta las 13 horas, en la carpa Cátulo Castillo de la Feria Municipal del Libro, que se desarrolla en la plaza Gral. San Martín de San Justo, los Autores Matanceros arrancamos con el primero de varios eventos que hemos organizado. Para esta ocasión, el eje de la convocatoria fue un micrófono abierto, para que todos los escritores de La Matanza, tuvieran o no libros publicados, pudieran leer sus obras e interactuar con el público.
Estuvimos presente para la lectura de obras Christian Malattia, Carlos Rigel y quien escribe. No por ser pocos, dejamos de aprovechar el espacio que se nos había cedido, leímos hasta que se nos secó la garganta, tomamos agua, y seguimos leyendo. Quienes me conocen saben que suelo criticar el poco apoyo del estado a la cultura. Esta vez estoy obligado a decir que el estado cumplió, el espacio estaba, lo que faltó, fue más escritores que lo aprovecharan.
La segunda actividad de los Autores Matanceros fue por la tarde, de 16 a 18 hs, en el Centro Cultural del STMLM. Otra vez los escritores fuimos pocos, por lo que nos saltamos el programa previsto y realizamos una ronda de lecturas. Participamos Adela Salas, Irene Gardes, Christian Malattia, Alberto Fontana, Alicia Castro, Humberto Gomez, Sergio Neinadel y yo.
Terminadas las actividades del día en lo que al grupo de Autores Matanceros se refiere, todavía pude disfrutar de otros eventos. Ya cayendo la noche, el escritor de Laferrere Omar Celiz presentó su segundo libro de poesías, titulado Un tiempo después, en el Centro Cultural del STMLM.
Y para cerrar la jornada, la gente de la Biblioteca Popular Madre Teresa, de la localidad de Virrey del Pino, presentó la obra Fiesta Tanguera, en el Teatro Enrique Pinti, con la participación de los cantantes solistas Silvia Graciela y Eduardo Franco, que interpretaron varias piezas clásicas de tango, y la pareja de baile formada por Patricia y Eduardo, que, como se suele decir en estos casos, sacó viruta al piso con su danza. La dirección estuvo a cargo de Luis Galard.

III Feria Municipal del Libro (17 de septiembre de 2010)

El viernes 17 de septiembre por la mañana, el periodista Jorge Maidana del programa Magazine Plural, que va de lunes a viernes por FM 103.9 Plural, hizo un resumen de la extensa charla que tuvo con los Autores Matanceros que estabamos en el stand 82 el jueves por la tarde.
La Feria Municipal del libro tiene en su programación actividades de las más variadas ramas de la cultura. Ese mismo viernes, la gente del afamado Festival de Cortos de Tapiales realizó la primera de varias proyecciones de cortometrajes pautadas para el evento que tiene lugar en la plaza Gral. San Martín de San Justo.
Luego de los cortos, se proyectó el largometraje “Básicamente un pozo”, del Grupo Humus, película que logró sorprenderme por la familiaridad con que se desarrolla un argumento completamente absurdo, una historia bien contada sin millones de dólares en efectos especiales.

jueves, 16 de septiembre de 2010

III Feria Municipal del Libro (16 de septiembre de 2010)

Por tercer año consecutivo se celebra en la Plaza Gral. San Martín de San Justo (Arieta y Villegas), la Feria Municipal del Libro, organizada por la Municipalidad de La Matanza. Un evento que es una fiesta de la cultura y permite el encuentro de artistas de distintas disciplinas.
Como en ediciones anteriores, los escritores de La Matanza tienen su propio stand, el Stand 82 de Autores Matanceros. Desde el primer día, allí pueden encontrar libros de Blas Barragán, Alicia Castro, Roberto Cisterna, Gloria De Lucca, Alberto Fontana, Irene Gardes, Elisa Peñaloza, Adela Salas, Javier Witzel, y muchos otros escritores que se irán sumando en los próximos días, libros de poesías, de cuentos, incluso de historia, libros creados por hombres y mujeres vecinos de las multitudes que recorren los pabellones de la feria. Por supuesto, si tienen ganas, también puede adquirir mi libro, Más oscuro que la noche.
La feria se extiende del 16 al 25 de septiembre, de 11 a 20 hs, salvo el sábado que cierra a las 22 hs.
Los escritores de La Matanza estaremos organizando los siguientes eventos:
Sábado 18/9, de 11 a 13 hs, en el escenario de la carpa: Micrófono abierto.
Sábado 18/9, de 16 a 18 hs, en el Centro Cultural del STMLM (Almafuerte 3150): Encuentro de Escritores Matanceros e Invitados, Evocación al Bicentenario desde los Autores Nacionales.
Domingo 19/9, de 16 a 18 hs, en el escenario de la carpa: Evocando a Almafuerte, Presentación de libros de Liliana Amodeo e Irene Gardes.
Martes 21/9, de 15 a 17 hs, en el Centro Cultural del STMLM (Almafuerte 3150): Micrófono abierto, Presentación de libros de Alicia Castro, Betty Cordoba y Alberto Fontana.

domingo, 29 de agosto de 2010

Continúa la Feria Cultural Rebelión (28 de agosto de 2010)

Como ya había referido antes, todos los sábados se realiza la Feria Cultural Rebelión, organizada por la banda de punk rock y heavy metal Vorkuta, de 16 a 18 hs, en la sede la MAR (Movimiento Argentino en Redes), Bruselas 955, barrio Los Pinos de Villa Luzuriaga, con entrada libre y gratuita.
Consultado los organizadores sobre los objetivos de la feria, nos explican que buscan "ocupar un espacio en los barrios trabajadores, donde poder difundir la cultura, y que esta sirva a los fines de la rebelión de los trabajadores". Nos aclaran que se refieren a "cultura en general, para hacer trabajar la mente", pero también que buscan "en particular divulgar material insurgente para contagiar a los trabajadores de la necesidad de rebelarse contra el sistema capitalista".
Con respecto a la convocatoria a la feria, la banda nos cuenta que es "para quienes buscan la otra realidad, contada por los mismos trabajadores", y agregan "pero también y principalmente a comunicadores sociales y artistas, para que tengan un espacio donde su arte o su mensaje pueda vivir, realizarse, existir..."
Muchachos (y muchachas también) que tienen claro lo que quieren. La Feria Cultural Rebelión abre sus puertas para propios, y para extraños que como yo, nos conformamos con mover una o dos neuronas de vez en cuando. Y para vos también. Acercate y dale una oportunidad a la cultura.

martes, 17 de agosto de 2010

Día del niño en la Biblioteca Popular Ornella Martinez (15 de agosto de 2010)


La Biblioteca Popular Ornella Martinez ha pasado por varias peripecias durante los últimos meses. en noviembre de 2009 tuvo que cerrar sus puertas al no poder pagar el alquiler de su antiguo local, de esa manera interrumpiendo todas las las actividades culturales que realizaban en la barrio Peluffo de Villa Luzuriaga.
Pero finalmente está de regreso. Gracias al aporte de una empresa de transporte y de comerciantes locales, la biblioteca cuenta con un nuevo local en la calle Carabobo al 4754. Y como parte de sus actividades, el domingo 15 de agosto celebró el día del niño.
El evento se realizó al aire libre, sobre la calle Miguel Cané, con castillos inflables, chocolate, juguetes y souvenires, elementos comunes en estos festejos, pero también contó con una parte literaria, donde los chicos que asisten a los talleres de la biblioteca leyeron breves poesías. También me invitaron a leer algunos de mis trabajos, por lo cual estoy muy agradecido.
Para cerrar la tarde, la banda Latinoamérica de Pie dio un breve recital. La biblioteca popular fue, una vez más, punto de encuentro para los que amamos la cultura

Feria Cultural Rebelión (14 de agosto de 2010)


Somos millones de vecinos los que habitamos el conurbano bonaerense. Y por un motivo u otro simpre estamos mirando a la Capital y le damos la espalda al barrio. Un ejemplo muy emblemático de esto es la cultura. Aquellos que intentamos difundir la cultura solemos convertirnos en satelites gravitando en torno al centro socioeconómico del país, reflejando lo que allí sucede y esperando que algo de esa cultura (y esto incluyo a la cultura independiente), se derrame de la mesa y llegue hasta nosotros.
Pero a veces uno se sorprende gratamente, y encuentra gente que intenta hacer lo contrario, generar cultura desde el origen, desde el barrio.
A partir del sábado 14 de agosto arrancó en el barrio Los Pinos de Villa Luzuriaga la Feria Cultural Rebelión. Organizado por la banda de punk rock y heavy metal Vorkuta, esta feria convoca a los exponentes locales de la música, el dibujo, la literatura, a periódicos y fanzines independientes, etc.
El lugar de reunión es la sede del MAR (Movimiento Argentino en Redes), organización social que trabaja en la zona y brinda su espacio físico para este emprendimiento cultural.
La idea de los organizadores es continuar con la feria todos los sábados, de 16 a 18 hs, y se invita a todo aquel que tenga materia para exponer que se acerque al lugar del evento, o se comunique con vorkuta_2010@hotmail.com

viernes, 13 de agosto de 2010

Reclamo por inseguridad vial en Dock Sud (12 de agosto de 2010)

Dock Sud es una ciudad centenaria en el partido de Avellaneda. Caminando por sus calles uno se topa con instituciones muy viejas, historia viva en cada esquina. Y camiones. Cientos de camiones. Camiones de gran porte yendo al puerto o al polo pretroquímico que atraviesan las calles de la ciudad.
El tráfico de camiones es un grave problema en Dock Sud. Uno de tantos. La contaminación también es moneda corriente. Pero por ahora concentrémosnos en la inseguridad vial. Para el jueves 12 de agosto se convocó a una marcha para reclamar justicia por Daiana Silvera, una niña fallecida en un accidente vial ocurrido en Alem y Di Benedetti.
El lugar de reunión fue la escuela nº33 Jorge Newbery, sita en Huergo y De Benedetti, hacia el mediodía. Mientras aguardaba el comienzo de la marcha, pude ver decenas de camiones doblar la esquina y pasar frente a la escuela. Moles de acero que hacen temblar el suelo.
La marcha la convocaban familiares a compañeros de escuela de la víctima. Cerca de las 13:00 hs un centenar de personas cortó Di Benedetti. La mayoría eran niños. En los últimos tiempos se ha vuelto casi una postal que los allegados a las víctimas reclamen justicia ante un Estado ausente. Me pregunto si también tendremos que acostumbrarnos a que los niños marchen pidiendo la justicia que los adultos no pueden o no saben conseguir.
La marcha avanzó sin incidentes sobre Di Benedetti hasta la Autopista Buenos Aires-La Plata, para luego deshacer el camino de regreso a la escuela. en un día nublado, con el viento del río cortando las carnes, los manifestantes marcharon golpeando las manos, recordando a una de las muchas víctimas de ese deporte muy nuestro de saltarnos las reglas de seguridad, de convivencia. A la mitad del recorrido esta marcha de gente reclamando justicia se cruzó con otros manifestantes que regresaban de una fiscalía por otro pedido de justicia. Un caso completamente diferente. Pero el mismo reclamo de familiares y amigos a los que les falta un ser querido.
La marcha terminó. La gente se desconcentró. Y los camiones siguieron andando.

lunes, 7 de junio de 2010

Presentación de libro sobre Isidro Casanova (1 de junio de 2010)

La avenida Venezuela divide Villa Luzuriaga de Isidro Casanova. El barrio Atalaya es vecino del barrio Los Manzanares, y de este último se puede ir caminando hasta el centro de Isidro Casanova. Pero la noche del 1º de junio era fría, así que opté por tomar el 317 para asistir a la presentación de un libro sobre la historia de Isidro Casanova, ciudad que el próximo año estará cumpliendo 100 años.
En un salón de fiestas, a media cuadra de la plaza céntrica, se presentó “Isidro Casanova, Pioneros, Barrios, Instituciones”, del periodista e historiador Alejandro Enrique. El lugar lució colmado de público, entre los que estaban presentes las fuerzas vivas de la ciudad, dos concejales de La Matanza, y miembros del Cehlam (Centro de Estudios Históricos de La Matanza) que expusieron una pequeña muestra de objetos históricos de los siglos XIX y XX.
Además de las palabras alusivas que prodigaron el autor y el editor del libro, se proyectaron en pantalla gigante un vídeo documental que incluye testimonios de algunos de los pioneros de la ciudad, y una colección de fotografías antiguas que se remonta a la primera mitad del siglo pasado.
Este es el segundo libro del autor respecto a su ciudad, Isidro Casanova, y según explicó, este nuevo tomo está centrado en los pioneros, aquellos que llegaron a un ámbito netamente rural para poblarlo y hacer los barrios que conocemos hoy. Sin duda, la primitiva historia de Isidro Casanova es una radiografía de lo que ha ocurrido en todos nuestros barrios de La Matanza, hace cien años, hace cincuenta, hace veinte, y quizá ahora, en alguna parte, hay vecinos sembrando barrios en medio del campo.

lunes, 31 de mayo de 2010

Bicentenario en Los Manzanares (25 de mayo de 2010)

Lo vi pintado en una pared. El 25 de mayo, a las 10 hs, celebración en la plaza de Los Manzanares. Ya había visto megaespectáculos, en San Justo de cerca, a metros del escenario, en la 9 de Julio, de lejos, casi nada. Faltaba ver como era la celebración en los barrios.
Esa mañana de 25 de mayo, la gente se fue reuniendo en las escuelas de la zona, para luego marchar en caravana a la Plaza San Juan del barrio Los Manzanares. De la escuela 82 vinieron encabezados por un móvil de la policía de la comisaria de Los Pinos, que traía en su cabina a los abanderados con las banderas de ceremonia, y detrás alumnos, docentes, padres y vecinos llevando una larga bandera argentina.
De la escuela 123 llegaron con banderas, pancartas, tambores y mucha algarabía, e hicieron su entrada con bombas de estruendo. Estas escuelas, junto con la escuela 71, que está frente a la plaza, son los tres principales centros educativos de la zona. Comparten sus estructuras edilicias con jardines de infantes, escuelas secundarias y escuelas para adultos.
Además de las escuelas, participaron el Centro Cultural Pierina Dealessi, veteranos de Malvinas, granaderos reservistas, autoridades municipales del área de educación, padres, vecinos y curiosos que pasaban.
El acto empezó en forma protocolar, con la presentación de las banderas de ceremonia, y sus abanderados y escoltas, orgullosos en sus guardapolvos blancos, con visible emoción por ser parte de la histórica jornada. Como visible era la emoción de todos los participantes. Emoción genuina. La emoción del aspirante a artista que prepara su acto con mucho esfuerzo, la emoción de madres que cosieron con sus propias manos los trajes típicos para las coreografías, de fotógrafos aficionados inmortalizando el instante en que el hijo, el sobrino o el hermano menor pasaba a formar parte de la historia viva del barrio, este barrio Manzanares que es una cédula de la Argentina, y que, como una cédula que contiene el ADN que le da identidad al todo, reflejó en ese acto del 25 de mayo lo mejor que tiene este país, las verdaderas raíces del ser argentino.
Dicen que el folklore es popular. Yo pienso que los chismes televisivos son populares, y que por otro lado existe el arte con raíces folklóricas. En la plaza del barrio Manzanares hubo lugar para bailarines eximios y otros improvisados. Hubo lugar para la alegría, y para el recuerdo. Bailes, coreografías y hasta una versión del Himno Nacional Argentino en quechua asombraron, enternecieron y arrancaron aplausos al público. También hubo exposición de trabajos alusivos a la fecha hechos por los chicos de las escuelas, y un buffet con precios muy económicos.
Los barrios son las cédulas del país, y en los barrios está su identidad. Lo bueno y lo malo. Porque lamentablemente, a medida que el acto avanzaba, los familiares de los chicos que ya habían actuado se iban retirando, por lo que el público se fue mermando. No por eso los últimos fueron menos aplaudidos. El aplauso era para premiar el esfuerzo y la dedicación, no el mero acto protocolar y espasmódico de las pomposas ceremonias, y por eso, el 25 de mayo de 2010, en la Plaza San Juan del barrio Los Manzanares, el aplauso fue generoso.

Bicentenario en la 9 de Julio (23 y 25 de mayo de 2010)

Todo era enorme. Como todo en la Argentina. Los stands eran gigantes. Los escenarios colosales. Hasta filas eran faraónicas. Y había que hacer fila para todo. Cientos de miles de personas chocando, tratando de ir a algún lado.
Todo era diverso. Como todo en la Argentina. Había stands de las provincias, de los ministerios públicos nacionales, de organizaciones de derechos humanos, y más. Música de todos los géneros, desfiles abarcando toda esa diversidad que conforma el país. Y largas filas para ver.
Y por supuesto, como en todo lo que sucede en la Argentina, había gente formada pacientemente en la fila, y los colados de siempre, aquellos que encuentran la felicidad en ganarle un casillero a un compatriota, a otro ser humano.
El domingo me tocó lluvia tan torrencial que el agua casi me arrastra. El martes, un día soleado, fui arrastrado por mareas humanas. Todos los espectáculos y muestras fueron de muy alto nivel. Pero era tanta la gente que finalmente uno no podía ver nada. Con paciencia, uno se formaba en la fila para entrar a un stand durante una hora, o esperaba junto a una valla durante dos horas el paso del un desfile, y quizás, no veía nada, más que multitud de cabezas delante suyo.
La verdad, si me hubiera quedado en casa, habría visto más, mucho más, de lo que vi. Pero aún así creo que fue una experiencia imperdible.

Bicentenario en San Justo (22 de mayo de 2010)

El día era gris. Pero gris en serio, con el cielo encapotado de nubes y ráfagas aisladas de viento. Y la llovizna que caía de a ratos. Muy finita, pero bien húmeda. Como el día. La humedad calaba los huesos.
No obstante, miles de personas se agolparon en la intersección de las calles Almafuerte e Indart, en San Justo, partido de La Matanza, para presenciar un espectáculo al aire libre conmemorativo del Bicentenario de la Revolución de Mayo de 1810.
Un enorme escenario fue montando sobre la avenida Indart, al igual que miles de butacas que ya estaban ocupadas cuando a las 16 empezó un festival folklórico que arrancó con artistas matanceros, y siguió con un bloque especial argentino-paraguayo, donde consagrados músicos de los dos países, junto con el Ballet Folklórico Nacional, repasaron las raíces musicales comunes a ambas naciones. El cierre estuvo a cargo de Peteco Carabajal.
El festival fue excelente, de calidad suprema, ¿qué más puedo agregar para describir el talento y calidad de artistas consagrados? Solamente que arrancaron una tormenta de aplausos entre el público, y que junto con la humedad, me provocaron una ligera torticolis por tener tanto tiempo el cuello hacia arriba, hacia el escenario. Pero era difícil dejar de mirar a esos bailarines que narraban historias con sus movimientos.
Después de la música vinieron los fuegos artificiales, que llenaron de colores el lienzo negro de la noche. En definitiva, fue una celebración con todos los lujos.

martes, 11 de mayo de 2010

Como gastar 12 pesos (10 de mayo de 2010)

Suponga que usted anda caminando por Plaza Italia y le quedan $12 en el bolsillo, la billetera o la cartera. Con ellos usted puede comprar en un carrito dos choripanes o tres panchos. O tomarse un café con medialunas en un bar.
También puede comprar libros. Hay libros por $12, por $10, por $8, por $5. Hay ofertas de dos libros por $10. Muchos de ellos se consiguen en la feria de usados de Plaza Italia, o si quiere, se toma un colectivo a Parque Rivadavia y todavía le quedan $10,80 para gastar.
Pero quedémonos en Plaza Italia. Caminemos un par de cuadras y lleguemos al predio de la Sociedad Rural. Ahí también puede gastar $12 en la entrada a la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, y pasear entre un mar de libros, algunos en oferta a los precios antes citados, pero que usted no podrá comprar porque ya se gastó los $12 que le quedaban en la entrada. Ni siquiera podrá saciar el hambre y la sed que provoca caminar de dos a tres horas porque los precios del buffete son demasiado altos, aun si usted no se hubiera gastado todo su capital en un mugroso ticket, que, a modo de burla, le promete que usted puede recuperar su valor si compra un libro con tapas de oro con incrustaciones de brillantes.
Así que si usted camina por Plaza Italia con $12 en el bolsillo, cómprese un choripán, cómprese un libro usado, pero no deje que las marquesinas colorinches del afamado megaevento le roben las ilusiones.

13º FLIA (1º y 2 de mayo de 2010)

Ocho y media de la mañana del 1º de mayo. Con los libros y la mesita para armar tomé el 242 hasta Ramos Mejía. De ahí el tren hasta Once. Luego caminar, y caminar, hasta Azcuenaga y Paraguay. En el estacionamiento recuperado por el centro de estudiantes de la facultad de ciencias sociales de la UBA, la cosa se estaba armando, los puestos iban surgiendo como hongos después de la lluvia. Pero el día era soleado, casi caluroso, y los puestos eran el esfuerzo de autores independientes por mostrarle al mundo su obra, su grito de ¡existimos!
La Feria del Libro Independiente y Autogestiva (FLIA) es un emprendimiento de autores que trabajan en forma horizontal para la difusión de sus obras y de la cultura independiente en general. Está abierta a todo el mundo y cualquiera puede participar en la organización de los eventos, que se realizan en diversos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y que se ha visto replicado en La Plata, Rosario y otras ciudades del interior. Incluso emprendimientos de similares características han visto la luz en Chile.
Al mediodía la cosa ya iba tomando color. Armé mi mesita entre los puestos de 4 Gatos, un espacio de arte visual con sede en Haedo, y un dibujante que pesar de estar enfermo igual fue a mostrar los libros que él mismo editaba, al igual que 4 Gatos y la mayoría de los expositores, que imprimen, cortan y encuadernan su obra con sus propias manos.
La FLIA es una feria variopinta y diversa. En los más de cien puestos que se armaron ese sábado 1º y domingo 2 de mayo, había poesía, narrativa, historieta, arte gráfico, editoriales independientes, revistas de diversos temas. Ahí estaba la gente de Guarnin, un diario de Castelar, y Baldosas Flojas, revista de la Capital, sólo por nombrar algunos de los medios gráficos alternativos que me dejaron material y con los que intercambiamos experiencias en esto de divulgar lo que vemos, ese algo indefinido que para algunos es la cultura independiente.
Mucha gente pasó por la feria los dos días que duró. Hubo charlas de los más diversos tópicos (aunque el sábado el tema excluyente fue el día del trabajador), hubo un escenario con números musicales y poetas leyendo su obra, hubo buffet, con el que se financia parte de los gastos, y el domingo por la tarde, el plato fuerte, el historiador Osvaldo Bayer participando de una de las charlas.
Las ventas fueron difusas. A algunos les fue bien. Yo, particularmente, llegué sin un centavo y me fui igual. Pero logré llevarme algunos libros, habidos mediante el arcaico método del canje, de Pablo Strucchi y Mariano Millan. Y un intenso intercambio de experiencias, folletos, emails, direcciones en Internet y la certeza de que la FLIA es un camino posible a un futuro mejor para la cultura argentina.

Atalaya Rock (10 y 11 de abril de 2010)

El Atalaya Rock ya casi es una tradición. Un festival del rock under que se realiza periódicamente en diversos lugares de Isidro Casanova, organizado por la gente del programa radial la Ruta del Rock (viernes 21 hs por FM 96.5). Incluso una vez lo hicieron en Manzanares. Ahí fue cuando los conocí, hice una nota del recital, y desde entonces, cada vez que me es posible, voy a los Atalaya Rock.
Los días 10 y 11 de abril se realizó el más reciente. Imagínense que van caminando por un barrio común y corriente, casas bajas, calles asfaltadas, poco tráfico. De pronto, el barrio se termina. Aparecen las vías del tren cortando en dos un amplio descampado. Y junto a las vías, un escenario enorme con luces y coreografía. A eso agréguenle una kermesse, un pelotero, una carpa para los músicos. Y por supuesto, más de veinte bandas en vivo.
La postal puede parecer casi mágica. Pero no tiene nada de magia, sino mucho trabajo y esfuerzo. El sábado a media tarde llegué al lugar, y los organizadores todavía realizaban mil actividades simultaneas para poner todo a punto. El evento estaba anunciado para las 15 hs, pero no se comenzó a probar sonido hasta casi las 20 hs.
¡Y qué sonido! De pronto, fue como si una ráfaga de viento sacudiera el aire anunciando tormenta. Pero no. Era el equipo de sonido del recital rugiendo. Y no sólo era la potencia. También la fidelidad. Estoy seguro que si una mosca pasaba por un micrófono podría distinguirse entre el ala derecha y la izquierda.
Las bandas comenzaron a sucederse, desplegando lo mejor del rock. Durante la noche del sábado y la tarde del domingo Isidro Casanova fue sacudida por un festival como nunca antes había presenciado. No era el primero, ni mucho menos, pero sin duda, fue el mejor que esta parte del mundo había visto, por la calidad del sonido, por el escenario (¿y ya mencioné el esfuerzo y trabajo que le ponen los organizadores?).
El Atalaya Rock es mucho más que un festival under. Es darte cuenta que aunque hay gente de todas las edades la mayoría rumbea hacia los cuarenta. Es que un desconocido se acerqué y te pregunté si su banda favorita ya tocó, y que te cuente de su banda y como la sigue a todas partes y que ese desconocido deje de ser un desconocido para ser el seguidor de La Chiva. Es cruzarte con un amigo que hace años que no ves, y que te invita a ir a la casa de otro amigo que vive cerca y volver los tres juntos a disfrutar del show.
Ah. Me olvidaba. El Atalaya Rock también es una muestra de que no sólo los pulpos de las industrias discográficas pueden hacer un espectáculo de calidad, sino que músicos y gentes independientes también pueden. Los independientes también podemos.

Festival contra la impunidad, la represión y el gatillo fácil (5 de marzo de 2010)

El viernes 3 de marzo estaba en casa, peleando con la computadora, y la máquina iba ganándole al hombre. En la radio escuché que esa tarde en la plaza de Atalaya, desde las 17 hs, habría un festival de rock y un acto para pedir justicia por varios casos impunes que involucraban a vecinos de La Matanza.
Me rendí y dejé muy ufana a mi computadora por la victoria, y me fui caminando hasta la plaza del barrio Atalaya, cuyo nombre es Plaza de los Héroes Egresados. A las 17 había un par de parlantes y un músico solitario probando su instrumento. De a poco comenzó a caer gente. Gente con banderas y remeras con rostros de seres queridos que ya no están. Y no es que no están por un accidente o una enfermedad, sino que alguien decidió que sus vidas eran bienes prescindibles y las tomó creyéndose intocables.
El acto fue convocado por los allegados a Abraham Arce y Carlos Lopresto, asesinados en diferentes hechos acaecidos durante el 2009, y, según denuncia de los familiares, estarían involucrados personajes con poder, o apañados desde el poder (y perdonen si utilizó el condicional, pero, para bien o para mal, hasta el personaje más siniestro se merece el beneficio de la duda).
También asistieron la Coordinadora Antirrepresiva, organizaciones sociales, y familiares de otros casos impunes, como Luciano Arruga, , desaparecido hace más de un año, aparentemente por la policía, Lucena, y otros tantos que me perdonen si no los nombro, pero no soy periodista, escribo según las cosas me vienen a la cabeza, y a veces olvido detalles, aun los más importantes.
Cerca de las 18 hs comenzó una marcha. Un centenar de personas salió caminando desde la plaza y se dirigió hasta la casa de uno de los indicados como asesino de Arce. Allí se produjeron algunos incidentes, con gritos y pedradas contra la fachada de la vivienda. De ninguna manera puedo justificar la violencia, pero entiendo la bronca, bronca que se genera en la impunidad. La violencia genera más violencia, y la única forma de detener esa espiral al abismo es con justicia, pero cuando la justicia no llega, la gente siente que lo único que le queda es gritar, y agarrar piedras de la calle y arrojarlas a la pared, un muro tan insensible como el muro que encuentran cuando pasean por juzgados reclamando algo mínimo y elemental: Justicia.
Después de la marcha, ya de regreso a la plaza, los familiares, uno a uno, contaron sus historias. Padres sin hijos. Hermanos sin hermanos. Gente sin su sangre, sin su vida. Chicos, porque eso eran, chicos que tendrían que estar estudiando, jugando al fútbol o invitando a alguien a ir a algún lado, chicos contando como era ese hermano, ese primo, ese esposo que se fue y que no iba a conocer a su hijo todavía en la panza de la viuda.
A continuación, vino el aguante de las bandas. Arrancó Incesto, con un furioso y contestatario heavy metal. Luego tocó Pentosario, una banda de punk rock. La música fue anecdótica. Buena música, pero apenas un susurro entre tantos gritos de dolor.

Presentación

Después de varios años de cubrir los eventos ocurridos en mi barrio, Los Manzanares de Villa Luzuriaga (sí, de Villa Luzuriaga, aunque la correspondencia llegue con códigos postales de San Justo, Isidro Casanova o Rafael Castillo), y encontrándome en la encrucijada de no saber si todavía pertenezco a esta minúscula parte del mundo o si debo buscar nuevos rumbos hasta encontrar una pared donde colgar el sombrero (no, no uso sombrero, sí, es una metáfora del hogar), de lo que estoy seguro es que me gusta la cultura, las ferias del libro y culturales, los recitales, las obras de teatro, las exposiciones, etc. También sé que gran parte de estos eventos pasan desapercibidos en el gran mar de los medios (nacionales o locales) o incluso aquellos que tienen un amplia cobertura no presentan algunos puntos de vista discordantes, centrándose en hablar bondades de eventos más económicos que culturales.
Como siempre digo, no voy a cambiar el mundo. Ni un poquito. Pero ya que estuve ahí puedo contar lo que vi, lo que pienso. Y para eso me pareció que un blog era la mejor opción. Como un cuaderno o bitácora donde uno puede anotar las vicisitudes del viaje (sí, es un viaje, el viaje de la vida). Los invito a leer, aunque la mayoría, cuando llegue a este punto, ya lo habrá hecho (interpretación libre).